Recoge el oro
“Tu aliento es lo único que realmente te pertenece.” - Maharaji
Puedes creer que tienes posesiones; por ejemplo, un par de zapatos. Te los pones y cuando están viejos, gastados y estropeados, los dejas de usar. Todo lo que tienes en esta vida envejece, se gasta, se rompe, y dejas de usarlo. No ocurre lo mismo con la respiración.
Cuando se trata del aliento, nunca te preguntas si deseas tomar el siguiente, no te cuestionas en absoluto si lo necesitas; lo necesitas y lo tienes. No hay nada igual.
Es una maravillosa relación de necesidad: tú necesitas el aliento, necesitas la existencia, y está a tu disposición. Te llega cada día, te llega en este momento, viene una y otra vez. Si hay algo valioso, algo de lo que debes acordarte, es de esta respiración.
No te digo que te acuerdes de mi respiración, sino de la tuya. Es un hecho básico, simple y lógico que tu aliento es lo único que realmente te pertenece. Nada más.
¿Es posible prestar atención a cada aliento? ¿Lo es?
Imagínate que llueve oro. Dondequiera que mires, caen lingotes de oro. Luego, para de llover, y dondequiera que mires, en kilómetros y kilómetros a la redonda ves el hermoso tinte dorado de todos esos lingotes de oro que están esparcidos por allí. ¿Acaso dirías: “No puedo recogerlos todos, así que me vuelvo a la cama”? ¿Lo harías? No. Recogerías todos los que pudieras tan rápido como fuera posible porque conoces el valor del oro y, puesto que lo conoces, no te cuestionas si realmente es posible hacerlo o no.
Ven a tu hogar, ahí es donde tienes que estar, ése es tu sitio. Vuelve al lugar donde puedes experimentar el sencillo consuelo del corazón, el consuelo de darte cuenta de su perfección, y de sentirte agradecido. Es reconfortante sentir que esto es lo importante. Es sumamente importante porque es lo único que tienes. Y si recordaras esto siempre, serías más rico de lo que puedas imaginar.
Ve a recoger todos esos lingotes de oro, tantos como puedas.
Prem Rawat-Maharaji