Invitación
Para estos dias, que la mayoría andamos un poco más relajados, os invito a ver estos videos. Seguro que si los escuchais con los oidos del corazón, os van a encantar.
Para estos dias, que la mayoría andamos un poco más relajados, os invito a ver estos videos. Seguro que si los escuchais con los oidos del corazón, os van a encantar.
Julio 25th, 2007 a las 18:24
Hola Julio:
Ando un poco perdida, pero me alegra verte pasar por mi blog. Yo aún no estoy de vacaciones, pero un poco de paz no me iría mal.
Gracia siempre por tus palabras.
Por cierto, me conmociona leer lo de Patus. Sólo la conocía por tu blog, pero este tipo de noticias le hacen a uno echar una mirada sobre su propia vida y la relatividad de la mayoría de los problemas. En realidad la mayoría ni siquiera lo son, aunque nos lo parezcan.
Un fuerte abrazo.
PD: me gustaría saber algo más de ella y de esa ilusión que dices que tenía. ¿Por qué no nos cuentas algo más en su memoria?
Julio 25th, 2007 a las 18:54
Hola Paula:
¡Ando un poco perdida! ¡Ando un poco perdida! Pues encuéntrate o reencuéntrate, que te tienes bien cerquita
Si además sabes que es así; que no tienes que buscar nada fuera de tí; que sabes lo que puedes encontar fuera; que la naturaleza te ha dotado muy completita…¿entonces….?
Que no tienes que renunciar a nada de lo que ahora te agrade, antes al contrario le vas a coger más gusto a todo, porque después de ese reencuentro, sabrás lo que te puede dar cada cosa; cada situación…¿entonces…?
Que la vida pasa, y dia que pasa sin haberlo disfrutado, A TOPE, en plenitud, habrá sido un día malgastado, perdido…¿entonces…?
Entonces, ¿a qué esperamos? ¿Cuando nos vamos a decidir a buscar con sinceridad, con valentía, con humildad, eso que nuestro corazón nos está demandando hace tánto tiempo?
Tal vez pensemos: bueno, eso sí está bien, ya lo atenderé más adelante; soy joven todavía, ¿pero es que acaso está reñida la juventud con el disfrute pleno? No lo entiendo
Con Patus no es que tuviera una relación estrecha, solamente la que se estableció a través del intercambio de comentarios recíprocos.
A través de estos y de sus post, supe de su enfermedad, y de su ilusión por vivir. Y esa su ilusión, de alguna forma nos la tranmitía a nosotros y nos hacía recordar que debíamos estar ilusionados por la vida. A nosotros, los sanos, que tan poco conscientes somos del maravilloso regalo de nuestra salud, seguramente porque nos falta esa ilusión por la vida.
¡Qué pena!, que teniéndolo todo, nos falte esa ilusión que nos haría disfrutar de tántas cosas como se nos han dado y se nos dan continuamente.
Pero hay una buena noticia y es que esa ilusión también se nos ha dado. Solamente tenemos que hacer un pequeño esfuerzo para descubrirla.
Un fuerte abrazo