Enséñame Maestro
¿Acaso soy consciente?
¿Acaso soy consciente de que tengo esta vida
en la que cada día,
que no me sienta pleno
es día malgastado?
¿Acaso soy consciente de lo que he recibido
de lo que se me ha dado
de ese libro de páginas en blanco
que nada más nacer
alguien puso en mis manos?
¿O acaso actuaré como ese simio
que con el libro y lápiz en sus manos,
garabatea una y otra hoja
y al final cansado,
las destroza?
¿Qué libro mostraré
con semejantes páginas escritas?
……………
……………
¡No, no quiero que así sea!
Quiero ir a la escuela
y decirle al Maestro:
Maestro enséñame
en las hojas que restan
a enderezar el trazo de mi escrito
sobre todo por ellos.
Es que… ¡los quiero tanto…!